El futuro del cine

En el mundo del cine llevan un tiempo locos perdidos, los dinosaurios se niegan a evolucionar; de momento son más grandes, más fuertes e intentan imponer sus reglas. ¿Pero por cuanto tiempo?

Las grandes teorías económicas asumen bases que de raíz son falsas; los consumidores son racionales. Pero supongamos que somos racionales, que pensamos cada vez que actuamos y nos guiamos por una norma interior entre coste/beneficio.

¿Que tiene esto que ver con el cine? El consumidor de cine ha visto mermado su beneficio de ir al cine y las propias compañías han tenido la culpa por falta de previsión. Televisiones más grandes, más planas, sistemas de sonido de 5 o 7 altavoces, subwofer, alta definición, etc.

¿Entonces que le queda al cine? Ir al cine se ha convertido en un artículo de lujo. Tienes que ir a las afueras, habitualmente a un centro comercial, necesitas coche, la entrada no es barata, vas con la pareja; ya que te acercas vas a cenar a un sitio cerca, incurrimos en más gasto.

Y al llegar al cine podemos tener la suerte de que nos toquen idiotas cerca que no paran de hablar, la imagen se ve peor que en nuestra casa, y al terminar la película tienes que salir por la puerta de atrás como si fueras un delincuente.

Yo no veo el valor añadido.

Ahora les han dado por hacer salas más grandes y más cómodas, el cine en sala digital se está imponiendo ahora al mismo precio que la normal, cuando antes te cobraban hasta un 50% más por ser digital, las butacas son sillones XXL. Señores, así SÍ se da valor añadido.

No pueden pretender cobrarnos por algo que no nos satisface; la calidad de vida digital ha aumentado y los cines tienen que hacer lo propio. Adaptarse o morir.